martes, 21 de junio de 2016

Comienza el verano

Hoy 21 de junio que se celebra la festividad de san Luis Gonzaga comienza el verano. Los informativos del tiempo ya ha avisado que empieza con fuerza con temperaturas elevadas en toda España, con un  cielo despejado los primeros días hasta que vuelva a nublarse empezando como casi siempre por el noroeste. Para mi es un día que me trae buenos recuerdos de infancia y adolescencia ya que era el día que empezaban las vacaciones de verano, además uno de mis mejores amigos de infancia y adolescencia se llamaba Luis por lo que solía felicitarle, lo que también hacía él tres días después con motivo de san Juan. Cuando estuve interno en La Salle de Figueras un día como hoy teníamos la oportunidad y alegría de regresar a casa, nuestro Prefecto se llamaba también Luis, le felicitábamos antes de despedirnos para dejar el colegio por tres meses de vacaciones. Al salir iba a casa de los tíos y de la abuela, comía con ellos y por la tarde emprendía viaje a Olot en el autocar que enlazaba mi población con la de mis tíos. Fueron años de estudio bastante bien aprovechados haciendo amigos, no demasiados, la mayoría eran solo compañeros de estudios, de juego y de trato relativamente correcto. Una amistad que perduró incluso después de dejar el colegio fue con un amigo de  Bañolas con el que entablé una verdadera amistad que  duró bastantes años, ya de casado él y con hijos y yo casado ya con M;ª del Carmen siempre que íbamos de viaje a Olot a ver a la familia le hacíamos una visita, comíamos juntos en su casa, pasábamos una tarde agradable con ellos regresando al atardecer a casa de mis padres. Como digo el verano me trae recuerdos variados, la mayoría de ellos agradables. La obsesión por la playa a mi personalmente no me ha quitado el sueño como quien dice, a mi esposa los primeros años de casados le gustaba, quería ponerse morena como mucha gente, a medida que pasaron los años perdió las ganas de bañarse y tomar el sol lo que yo agradecí,
preferíamos conocer lugares típicos de la población costera que visitábamos, entrábamos en comercios para comprar alguna prenda o recuerdo, comíamos en restaurantes cenando en los apartamentos que solicitábamos a RCI ya que compramos una semana en propiedad en Oropesa de Mar que hace años lo traspasamos a nuestro hijo para que disfruten como lo están haciendo de la semana.  

martes, 14 de junio de 2016

La misma ritina

Cada vez que se despide nuestro hijo tenemos la misma conversación. Me da consejos y me insta a que me distraiga y delegue en otras personas para que no esté tan agobiado. Esa no es la cuestión desde  mi punto de vista, él está lejos y no acaba de entender la multitud de incidencias que a diario  surgen, que hay problemas y situaciones que solo yo puedo resolver. Claro que se puede delegar y lo hago con frecuencia haciéndome ayudar por Mª Eugenia que él mencionó pero hay cuestiones que es preferible o necesario que resuelva yo personalmente. En cuanto a que me distraiga, que acuda a alguna actividad que programa la UADI, que vaya a tomar alguna consumición en alguna terraza ahora que hace buen tiempo y que las tardes son largas, que viaje alguna vez aun que sea solo llegando a tiempo por la tarde para recoger a su madre, o que si llego más tarde sea Mª Eugenia que la reciba mientras llego, aun que ello suponga gastar mas dinero tengo que hacerlo con el fin de distraerme. Yo tengo claro que él habla como quien dice de memoria, no sabe que puedo pasar días sin salir a la calle por las tardes, que me basta ver algún programa de TV preferentemente deportes o alguna película, que soy casero y sobre todo no se da cuenta que a las seis y cuarto he de recibir a su madre puesto que a las siete cenamos, que por la noche una vez he acostado a Mª del Carmen prefiero estar en casa esperando que la cuidadora de turno llegue para pasar la noche en casa. Cuando le dije que prefiero que a las diez quiero que esté ya en casa quejándome de que Mª Eugenia llega a las diez y media no le gustó, diciéndome que media hora más o menos no tiene importancia estando bien su madre que se duerme de inmediato una vez está acostada, que tengo servicio de teleasistencia por lo que no debo preocuparme. Ya sé que todo lo que me dice es por mi bien, para que no me preocupe y para que esté tranquilo, no se da cuenta que la mayoría de los días es así, solo cuando como ayer hay algún contratiempo me pongo nervioso, lo que no me hace ningún bien
por su puesto pero también es cierto que los contratiempos o problemas no suceden todos los días afortunadamente.