jueves, 13 de febrero de 2014

Excomunión

El que fue durante bastantes años secretario de la Conferencia Episcopal Española Monseñor Camino, jesuita, acaba de afirmar que quien colabora  para practicar abortos está excomulgado inmediatamente, es decir, de forma automática. Lo primero que pensé es que la Iglesia que el obispo representa de forma oficial sigue en la línea de condenar no de perdonar. La excomunión para un católico supone que queda apartado de la Iglesia, que no puede recibir ningún sacramento y por supuesto tampoco puede celebrar la eucaristía y menos recibir el cuerpo de Cristo en el acto de la comunión. Las puertas del infierno se abren de par en par para él y al morir en pecado mortal y apartado de la Iglesia irá seguro a tal horrible lugar. Independientemente de si abortar es pecado grave ante Dios lo, que llama la atención es que la Iglesia oficial no encuentra otro recurso que la condena, que no es capaz de ofrecer el perdón. No sabemos la forma de actuar que tendría Jesús pero me inclino a que antes de condenar ofrecería al pecador que colabora en un aborto el perdón. Si resulta que  colaborar en un aborto supone de inmediato la excomunión ¿a qué se expone la mujer que decide abortar? En vez de hacer hincapié en todo lo que supone una relación sexual responsable, con preservativos incluidos, que la Iglesia no acepta, insistiendo en una educación en el amor y en una paternidad responsable, la Iglesia oficial sólo mira que abortar, sin que valga circunstancia alguna,
es un asesinato. Para ella y para todos los ultracatólicos no hay diálogo ni discusión posible. Cierran filas, defienden a ultranza al neonato y no se preocupan en absoluto por la adolescente o mujer que ante el dilema de tener el hijo o abortar opta por lo segundo. No me parece justo, creo que siempre se pueden contemplar diversos supuestos y no criminalizar sin más a la persona que decide abortar y menos llamarla terrorista como hacen algunos/as fanáticos.

jueves, 6 de febrero de 2014

Mucha lluvia

Sigue siendo un invierno muy lluvioso, para mi gusto demasiado. Es un invierno frío, lluvioso y desapacible. Lo peor es que el la costa cantábrica ha hecho verdaderos estragos debido al temporal costero que ha arrasado todo lo que ha encontrado, con unas cuantiosas pérdidas, un buque partido en dos con fuel en su interior lo que puede provocar una catástrofe ecológica si se derrama al  mar. Lo malo es que además, este temporal ha ido acompañado de viento que en algunas ocasiones ha llegado a 140 kms por hora. El invierno no ha terminado, estamos a medio camino, por lo que aún nos puede dar desagradables sorpresas. Por ahora en la Comunidad de Madrid se ha notado el frío y ráfagas de viento pero no ha sido tan perjudicial como en otras partes de España, sobre todo la zona norte desde Galicia hasta el pirineo francés. No hace mucho en Madrid tuvimos un tiempo propenso para la nieve, nevó algo, pero por suerte no cuajó nada lo que hizo transitable el tráfico y los desplazamientos por la capital. Imagino que los esquiadores están contentos ya que ha sido un invierno de nieves que augura, según el refrán, un año de bienes. Los fines de semana que Mª del carmen acude a Respiro Familiar, han sido lluviosos y con temperaturas muy bajas por lo que se ha hecho necesario el transporte. Llevamos meses que salvo el fin de semana, hace quince días, no hemos podido ir andando al Centro de Día, lo que a mi personalmente me fastidia bastante ya que tanto a ella como a mi nos conviene andar. Este fin de semana(8-9 de febrero 2014) vuelven a pronosticar lluvia lo que impondrá una vez más el transporte. No parece que el mal tiempo, el frío, el viento, el temporal y en algunas zonas de España la nieve se puedan dar por terminados. Seguiremos resignados al tiempo que la naturaleza nos depare confiando que la primavera, a finales de marzo,
nos ofrezca un rostro más agradable y apacible. Por el momento tenemos que convivir con un tiempo más bien desapacible con una sonrisa aunque sea de resignación.